miércoles, 26 de junio de 2013

Charles Baudelaire


Es imposible recorrer una gaceta cualquiera, de no importa qué día, qué mes, o qué año, sin tropezar a cada línea con los signos de la perversidad humana más espantosa, al mismo tiempo que con las jactancias más sorprendentes de honradez, de bondad, de caridad y las más descaradas afirmaciones relativas al progreso y a la civilización.

 Cualquier diario, de la primera a la última línea, no es más que un tejido de horrores. Guerras, crímenes, robos, impudicias, torturas, crímenes de príncipes o de naciones, crímenes de particulares, una borrachera de atrocidad universal.

 Y con ese asqueroso aperitivo, el hombre civilizado acompaña su comida cada mañana. Todo en este mundo transpira crimen: el diario, la pared y el rostro del hombre.

 No entiendo cómo una mano pura puede abrir un periódico sin una convulsión de asco.


CHARLES BAUDELAIRE (MI CORAZÓN AL DESNUDO Y OTROS PAPELES ÍNTIMOS)

No hay comentarios:

Publicar un comentario